LA LEY DEL CIBERESPACIO EN VENEZUELA Y COMO LO VEO YO
Hoy en día
y derivado de la pandemia del COVID19, el cual nos llevó aceleradamente al
incremento de uso de herramientas tecnológicas y la internet, para permitir el
inusual desenvolvimiento de las actividades, formativas, comerciales,
industriales, financieras, gubernamentales y en general la única herramienta
que permite motorizar estas actividades en estos difíciles tiempos.
Es común para
los venezolanos, tener acceso a canales directos con los entes u órganos del
Estado, lo cual hace que el ciudadano común se sienta atendido en una forma más
eficiente.
Esta Ley,
busca regular en forma consiente el uso de este importante medio de
comunicación, Por ende tendríamos en esta herramienta legislativa que reglamentar
los principios constitucionales de libertad de expresión, así como otras leyes
que regulan la protección de los datos personales, de género, de niños, niñas y
adolescentes, contra el odio, entre otros aspectos.
Lo que trae
como consecuencia buscar dar garantías de seguridad a los procesos que se
llevan a cabo a través del uso de herramientas TIC, ya que actualmente es
normal un uso abusivo, irresponsable e irrespetuoso de estas redes, así como el
gran peligro que conlleva; cuando se navega en la internet no siempre se es
consciente de los riesgos y se tiene la sensación de hacerlo desde la más
estricta intimidad y seguridad, que da la privacidad del equipo.
Es por esta
razón que los términos ciberdelincuencia, ciberterrorismo o ciberataques son
cada vez más comunes.
Una mención
y ejemplo relevante de procesos financieros importantes en el país qe se llevan
a cabo a través del uso de las TIC es el mercado que se ha desarrollado con una
nueva modalidad de pago y compra como lo son las criptomonedas, cada vez más en
crecimiento, a la que se ha incorporado nuestro país con su propia cripto el
Petro, las bolsas oficiales y su organismo regulador la SUNACRIP.
Asimismo,
podemos también determinar otro factor importante, como determinar quién es el
propietario de la página web, independientemente de donde se generó el
contenido, porque el que compró el dominio es venezolano, por así lo determina
la propiedad.
Cuando como
venezolanos accedemos a un servicio como google o facebock, estamos entregando
elementos de nuestra identidad a servidores que están fuera del territorio
nacional, por lo tanto, yo soy responsable si esa información se genera fuera
de éste y está identificado como un connacional, o que toda esa creación fue en
este país.
En este
contexto, Las personas que escriben contenido de odio sobre el país o acontecimientos
internos de la nación generalmente son generados desde aquí (Venezuela), porque
no suele ser de interés de personas de otras nacionalidades, o fue generado por
un tercero con información suministrada por un venezolano, lo cual constituirá una
fuente de identificación del autor del delito.
En otros
países el anonimato es posible, en nuestra Constitución está expresamente
prohibido, En ese país se ofrece a los proveedores crear cuentas anónimas, sin
embargo, este anonimato permite que también la información pueda ser falsa,
siempre habrá alternativas para eludir la Ley y siempre la Ley encontrará
caminos para hacerse valer.
Vanessa Díaz
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